viernes, 27 de julio de 2007

Iquitos

Brausen tiene de nuevo problemas de nutrición con el conejo, ahora no le gusta la ensalada que le he comprado, este conejo tenía que haber nacido en los años del hambre iba a saber lo que es bueno.

Iquitos: La ciudad de Iquitos (Perú) se encuentra en la selva norte, al oriente del país. Es capital de la Región Loreto, que con casi el 30% del territorio nacional es la mayor y más septentrional del Perú. La ciudad se halla a orillas de un brazo secundario del río Amazonas, frente a un gran blanco permanente llamado Padre Isla, boscoso y de casi veinte kilómetros de longitud. En esta ciudad se desarrolla casi toda la trama del libro de Mario Varga Llosas: Pantaleón y las visitadoras.
Iquitos: Calle de Madrid, situada paralela a la calle de Alcalá sobre el número quinientos.

Yo me dirigía, en un estado lamentable (por favor no bebáis nunca sake), a una entrevista de trabajo, para lo cual me bajé en el metro Suances. Como mi sentido de la orientación no es uno de mis fuertes, tomé la senda equivocada y aparecí por arte de magia en la calle Iquitos.
Justo antes de enfudarme traje y corbata me acababa de terminar Pantaleón y las visitadoras, por lo cual quede maravillado ante tan prodigiosa sincronía.
Atónito miré al cielo, buscando una señal, esperando a una ígnea paloma descendiese sobre mi para indicarme, al fin, cual es mi camino en este jodido mundo. Cual Moisés, me giré tratando de encontrar una zarza ardiendo que me proporcionase unas actualizadas tablas de la ley, ni siquiera vino un arcángel disfrazado de borracho a hablarme en arameo clásico.
El cielo siguió tan sucio que el azul pareció gris, los arboles y matojos varios de la zona continuaron desprendiendo una escuálida sombra y los viandantes que me vieron aceleraron el paso ante mi cara de zombie resacoso.
Yo que pensaba haber encontrado la gran Sincronía, la Sincronía divina, que me iba a rescatar de este laberinto en el que resisto maltrecho e indicarme mi misión vital, me tuve que conformar con seguir andando, arrastrando un pies tras otro, haciendo lo que ya dijo Machado: "caminante se hace camino al andar"

Hoy Brausen hace una "contrarecomendación": ¡No al Sake! Por Dios, que alguien lo prohiba y no malgasten sus esfuerzos censurando las portadas del Jueves que solo nos hacen reír.
¡Viva la república!

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Según el telediario la gente que vive en Madrid no está muy contenta con la ciudad (ruido, obras... ya sabes). Va a ser que necesitas explorar nuevos horizontes, si además de cambiar de trabajo cambias de ciudad va a ser la de mi madre chico!! en fin, hablamos vía internet. Mua

Anónimo dijo...

Y yo me pregunto...¿para que quieres sabes cual es su cometido en esta vida??Si algun día lo sabe...que pasa lo va a acatar al pie de la letra? O por el contrario piensa revelarse contra él por haber sido tan mundano y cruel con usted previamente?Que aburrido sería saber siempre lo que se va a hacer,como van a salir las cosas,no?Y si no le gustase lo que le depara el futuro?Que deprimente sería vivir sabiendo que se va a llegar a algo que l desagrada...Hay que pensarse mejor las cosas antes de desearlas...

En cuanto al conejo...preguntese...se comeria usted esa ensalada?Yo probaría con el chope de todas maneras...


Y señorita..poca gente hay contenta con algo hoy en día, yo creo que a las personas nos gusta regodearnos en nuestro descontento, supongo que será por ese dicho de "si duele significa que estamos vivos"...

Anónimo dijo...

En este momento tienes un anuncio de consejos sobre nutrición, a lo mejor están especializados en conejos... quién sabe... todo es probar!

Anónimo dijo...

Qué libro tan divertido el de "Pantaleón y las visitadoras", este Vargas Llosa qué bien escribe.